Pedro Burgos, fotógrafo apasionado

Tener pasión, ilusión, tesón… por lo que uno hace ayuda a hacer un buen trabajo. Pedro Burgos tiene algo de esos ingredientes, le fascina el retrato y la luz y le apasiona todo lo que tenga que ver con la fotografía, y el resultado está en sus excelentes retratos.

Cuenta, que su trayectoria en el mundo de la fotografía es corta si hablamos de la fotografía con cámara réflex, ya que la cámara compacta le ha acompañado siempre para captar cualquier mágico momento con amigos o familiares. Hace pocos años se compró su primera réflex y fue cuando entró de lleno en la Fotografía, y comenzó a descubrir las posibilidades que le ofrecía disparar en manual y controlar los diferentes aspectos en cada toma.

Aunque su trabajo profesional se ha desarrollado en el campo de la informática durante años, su interés por el mundo de la imagen le llevado finalmente a instalar un estudio en su propia oficina, introduciéndose de esta manera con la fotografía profesional.

Reconoce que la mayoría de trabajos que hace suelen ser intercambios, ya que lleva poco tiempo y no es un fotógrafo muy conocido. Pedro sabe que no es buen momento para la fotografía, y se plantea este nuevo proyecto con una meta a largo plazo, lo que sí le interesa en disfrutar de su pasión y, al menos, tener una pequeña ganancia que le permita seguir pagando facturas y poco a poco aumentar el equipo necesario para ofrecer un servicio de calidad.

Sigue formándose, tiene deseos de aprender, en los últimos tiempos además de realizar cursos sobre iluminación, le interesan otros relacionados con el procesado y retoque en Photoshop, expresa que le está “picando el gusanillo de la fotografía de fantasía y los montajes”.
Una de sus últimas fotografías compartidas en el muro de Flickr de “Huelva y sus fotógrafos”, fue realizada un taller impartido por César Gil -otro gran fotógrafo- y aunque considera que no es una de sus mejores fotos por su carácter de práctica, me da permiso para “criticarla”.

Aquí está uno de sus retratos, para mí un magnífico trabajo que supera los ejercicios de clase de cualquier alumno principiante. Me llamó la atención esa mirada hierática y distante; pareciera un maniquí que grita silenciosa tras el cristal con su expresión indolente. Magnífica iluminación, composición, modelo y virado, elementos que contribuyen a reflexionar sobre su pensamiento, que hacen crear una posible historia, en definitiva que te transportan a otra realidad.

Para terminar, y para los que no conocéis a Pedro Burgos, aún estáis a tiempo. Os aconsejo visitar su Web y Flickr:

– http://www.pedroburgos.es/

– http://www.flickr.com/photos/56175831@N07/